La IA crece, pero el SEO mantiene la delantera

El auge de la inteligencia artificial ha generado la percepción de que está desplazando prácticas digitales tradicionales. Sin embargo, un reciente estudio confirma que, en el proceso de decisión de compra online, las búsquedas orgánicas continúan teniendo mayor peso que la IA.

Si bien el uso de aplicaciones basadas en inteligencia artificial crece a un ritmo constante, la diferencia frente a los motores de búsqueda sigue siendo significativa. En el momento previo a realizar una compra online, la mayoría de los usuarios confía más en las búsquedas tradicionales que en los resultados ofrecidos por herramientas de IA.

El SEO sigue siendo clave para el tráfico y las conversiones

El informe señala que el volumen de búsquedas tradicionales es ampliamente superior, lo que se traduce en un número mayor de conversiones. El SEO sigue siendo el canal más sólido para generar visibilidad, tráfico y ventas en línea.

La inteligencia artificial todavía se encuentra en una etapa temprana dentro del recorrido del consumidor digital. Aunque es posible que en el futuro logre un mayor protagonismo, por ahora el camino que le queda por recorrer es largo.

Estrategias combinadas: SEO + IA

Para las empresas, el reto no es elegir entre uno u otro, sino optimizar su presencia en ambos canales.

• SEO (Search Engine Optimization): permite aparecer en los motores de búsqueda tradicionales, donde se concentra la mayor parte del tráfico.
• GEO (Generative Engine Optimization): estrategias diseñadas para mejorar la visibilidad en plataformas impulsadas por IA generativa.

Descuidar cualquiera de los dos espacios es perder oportunidades de negocio. La integración de ambas estrategias garantiza que la marca esté presente tanto en la tecnología de uso masivo como en la que está emergiendo con fuerza.

Conclusión

El estudio confirma una realidad: el SEO no ha perdido vigencia frente a la inteligencia artificial. Por el contrario, sigue siendo la principal vía de tráfico y conversiones online. La recomendación es clara: las empresas deben mantener una estrategia sólida de optimización en buscadores, mientras comienzan a trabajar en su posicionamiento dentro de los nuevos entornos de IA generativa.

En el escenario digital actual, no se trata de elegir, sino de sumar.